Elegir Abogada Laboralista
Hoy voy a contaros cómo elegir abogada laboralista, sería muy sencillo deciros que me elijáis a mí, pero no es mi estilo. La decisión sobre qué profesional es el más adecuado en cada caso es algo muy personal, y que sólo compete al interesado.
En esta entrada os daré unos “consejos” que podéis seguir para elegir el mejor abogado para vuestro caso. La decisión de qué será lo que más pese a la hora de tomar una decisión es completamente tuya. Si ahora mismo necesitas una abogada laboralista y crees que yo soy la mejor opción puedes contactar conmigo aquí:
Qué es un abogado laboralista
En Derecho existen diferentes ramas de especialización. Una de ellas es la del derecho laboral. Estaríamos ante la rama del derecho que se encarga de las relaciones laborales o de trabajo. La regulación de las mismas, desde los contratos hasta los despidos. Negociaciones colectivas, prestaciones por invalidez o desempleo…
En el transcurso de nuestra vida laboral es probable que tengamos problemas jurídicos respecto de estos y otros temas. Es en ese momento cuando elegir abogada laboralista se muestra como un proceso de capital importancia. La relación que tengamos con nuestro abogado debe ser fluida. Debemos tener claro que entendemos a la persona que nos representa.
Premisas para elegir abogada laboralista
La siguiente relación no pretende en ningún caso ser una guía estricta de cómo elegir un abogado de derecho laboral. Es más una serie de cuestiones que deberíamos tener en cuenta para esa elección. Lo cierto es que sirve tanto para un abogado laboralista como para abogados de otras ramas del derecho.
Decidir qué cuestión es la que debe tener más peso. O descubrir otras razones o motivaciones que nos pueden facilitar la decisión, es ya una cuestión personal que debe tomar cada uno. Vamos a ver una serie de premisas que a mí me parecen fundamentales:
La experiencia es un grado…
No lo dudéis nunca, la experiencia es un grado. En todos los ámbitos de la vida y en el terreno profesional es igual. Por ello para un tema de derecho laboral no podemos contar con un abogado que no esté especializado en esta rama del derecho. Aparte de esa especialización tan necesaria su experiencia en el campo es un plus a tener en cuenta.
Ganarse tu confianza…
La confianza es uno de los ingredientes más necesarios en tu relación con quien va a ser tu abogado. Una confianza que debe ser bidireccional, esto es la comunicación debe ser abierta por ambas partes. Un buen abogado no debería decirte nunca lo que quieres oír. Debe contarte las cosas como son, sin edulcorar para que nunca pierdas el suelo bajo tus pies.
No en vano vas a tener que compartir con tu abogado datos muy personales. Para que esto sea así debes tener seguridad en él, una seguridad que nace de la confianza. En ocasiones los procesos judiciales son largos y sin confianza se harán eternos, y lo peor de todo es que no acabarás satisfecho.
Buena reputación…
Que hablen bien de uno suele ser una muy buena señal. Si quien habla bien de ti es un cliente es sin duda una buena señal. Una opinión positiva nacida de una experiencia personal es una buena tarjeta de visita. Lo cierto es que tendemos a dejarnos aconsejar por amigos y familiares. Así las cosas el boca a boca sigue siendo una de las mejores formas de elegir a un profesional.
Internet pone a nuestra disposición diferentes canales para opinar sobre profesionales y servicios varios. Directorios de abogados en los que clientes valoran su trabajo. Pero como para todo lo que nos encontramos en la red de redes, debemos actuar con mirada crítica. No todas las opiniones en Internet son “reales”. La reputación en la red se ha convertido en un nicho de negocio, y se eleva del mismo modo que se hunde por intereses comerciales.
Los honorarios…
Como cualquier actividad profesional el derecho laboral tiene unos costes, en este caso hablamos de los honorarios del abogado. Debes pedir que en eso sea claro y diáfano, debes saber qué coste van tener para ti sus servicios. Todo lo que no sea así hará que no se pueda cumplir la tercera de las premisas que te he expuesto.
Llegados a este punto ya deberías tener claro que premisas son las necesarias para elegir a tu abogada laboralista. Pero seguro que tú tienes otras diferentes, ¿cuáles son? No dudes en compartirlas con todos nosotros en los comentarios de esta entrada. Te leemos atentamente…